Mucho se habla de la construcción de la famosa autoestima, pero de plano todos hablamos y decimos cualquier cosa de ella, y aún no sabemos ni cómo medirla. Tal vez me van a decir que se puede medir con test o con dibujos que luego se interpretarán, otros dirán que se puede medir a "ojo de buen
cubero" si la persona se desenvuelve ágilmente en la sociedad o en su profesión, pero la realidad es que no hay nada que pueda hoy decirnos con precisión si una persona está o no en niveles óptimos de auto estima.
Otro excelente consejo que como padres debemos en entender e internalizar es que en ningún momento debemos de comparar a nuestros hijos. No importa si sus hermanos mayores o menores son mejores o si los vecinos o primos o los mismísimos hijos del lechero. Comparar es la mejor manera de destruir la seguridad de los pequeños.
Por último y no por eso menos importante, está el auto concepto. Cómo se ven nuestros pequeños a ellos mismos. Si nosotros constantemente les celebramos sus capacidades y éxitos (sin importar cuán pequeños sean) entonces seguramente les estaremos desarrollando una gran imagen de ellos mismos.
Es con estos pequeños y sencillos ejemplos que podemos ayudar a que nuestros hij@s logren un verdadero futuro con una mente sana.
Tienes preguntas? Háznoslas llegar al correo adriansalama@gestalt.mx
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