De todas las historias de éxito de las que me he enterado, todas parecen tener la misma característica. Y esta no es la abundancia en recursos, a quiénes conocían, la cantidad de likes en sus publicaciones o incluso la cantidad de amigos que tenían. Todo se reduce a el hambre que tenían por hacer realidad su sueño.
Esa parece ser la clave del éxito. El hambre por hacer realidad tu sueño. Va por última vez y dicho gramaticalmente diferente. Lo que distingue a alguien que sale de la nada o alguien que tiene más éxito teniéndolo todo, es el HAMBRE POR CUMPLIR CON SU SUEÑO
Hoy te pregunto... ¿tienes hambre?
Si la respuesta es un no, oscila en un no, o piensas que el hambre es sólo fisiológica, entonces este artículo no fue escrito para ti.
En mi caso, yo sí tengo hambre por cumplir con mis sueños. Que de verdad es sólo un sueño, pero con ese tengo para que el hambre sea tan profunda, que no me permita ni dormir correctamente como para dejar de buscar cumplirlo. Y si ese sueño se cumple en unos meses o unos años, la realidad es que cuando tienes hambre cada segundo y cada año es exactamente igual. El tiempo se detiene porque cuando tienes hambre el aquí y ahora se apodera de tu vida. Todo es tan presente que no existe otro momento que el hoy.
Te pregunto otra vez, ¿tienes hambre?
Aclara tus metas, realiza tu sueño y con el tiempo ese objetivo será alcanzado y estarás mareado por la velocidad con la que las riquezas te llegarán.
Si tienes hambre, ahora es el momento de empezar. Empieza ya y sacia tu hambre
Escrito por: Adrián Salama. 
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