Hace unos días, tuve la oportunidad de
platicar en un desayuno con una persona que admiro mucho, y fue gracias a ese
desayuno que surgió la idea de este artículo.
Lo apodé, de la cabeza a los pies, porque es así como la mayoría de las
empresas trabajan la comunicación.
Anatómicamente, antes de que toda la
información llegue hasta nuestro cerebro (y lo inunde de ruido innecesario), la
naturaleza generó (sabiamente) un sistema que permitiría en nosotros los seres
humanos, una reacción automática y especializada para la supervivencia. A esta
respuesta anatómica, los médicos la han apodado “arco reflejo”
Este arco reflejo es muy importante para
evitar que nos dañemos severamente por una falta de respuesta cerebral. Es como
un piloto automático. En las empresas también existe y lo llamamos
coloquialmente “bomberazos” No es la mejor opción, ni la más recomendada, sin
embargo suceden.
Pondré un ejemplo:
Si la cabeza manda una orden de quitarse
los tenis y comenzar a correr sin protección, los pies sabrán que se van a
lastimar, porque sienten el piso y saben perfectamente lo que pueden y no
pueden tolerar. Sin embargo como los pies no tienen decisión, sólo emitirán
señales de dolor que la cabeza puede ignorar. Con el paso, los pies se irán
dañando, lo que hará que se dañen también las rodillas, la cadera, la columna y
hasta el final el cuerpo entero.
Con esta narración puedo denotar que,
cuando se toma una mala decisión y no supervisamos o nos retroalimentamos, se
daña toda la estructura de una organización, a pesar de creer que la base de
nuestra pirámide lo aguanta todo.
Es por eso que la comunicación es lo más
importante que existe dentro de una organización.
Piensa en esto, una organización no es
otra cosa que: un sueño hecho realidad por medio de las conversaciones que se
llevan entre todos los integrantes que la conforman.
Si la organización esta formada por
conversaciones, entonces la comunicación es en donde nos tenemos que enfocar
para evitar los problemas que puedan surgir o estén surgiendo. Mientras más
informados estemos, más capacidad de reacción y de solución habrá.
Para crear un ambiente de comunicación
fluida, lo primero que tenemos que desarrollar, es la capacidad de la cabeza a
recibir y procesar la información que va a recibir de toda la organización.
Para esto se usa el Coaching Gestalt. Donde la visión del coach está totalmente
integrada a una de las premisas más importantes de la psicología de la Gestalt.
“el todo es más que la suma de sus partes” Esto se puede comprender con el
ejemplo que les di al inicio. No importa si es pies o cabeza, si una parte se
lastima, toda la estructura se daña. Es por eso que como coach, lo que tenemos
que apoyar a la cabeza es a eliminar el EGO y sentirse como el todo y no sólo
como una parte o la parte más importante.
Cuando la cabeza ha aprendido a procesar
y recibir la información, entonces comienza a desarrollar a otras partes de la
organización para hacer exactamente lo mismo y así evitar ser el único receptor
de la información. (el ejemplo del arco reflejo, pero esta vez como un segundo
al mando)
Para concluir, cuando nos dedicamos a
mejorar la forma en cómo nos comunicamos en las conversaciones que tenemos a
diario dentro de nuestra empresa y nuestra vida, el único resultado que podemos
obtener, es el de mayor productividad y
entendimiento. ¿a poco no es un tema que quisieras obtener?
Vamos a conectarnos
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